Adopción de Bety

La primera vez que vimos a Bety nos partió el alma. Estaba en una jaula de la protectora de Elda, acurrucada en un rincón, temblando y mirándonos de reojo asustada. A su alrededor, varios perros grandes ladraban y hacían piruetas para llamar nuestra atención. Pero aquella pequeña perrita nos había preocupado demasiado como para pensar en nada más, y supimos que no podíamos marcharnos de allí sin ella. La cuidadora del refugio nos contó que Bety había sido abandonada allí por su propia familia. Tenía tos de las perreras, y una patita lesionada.

Nuestra compañera Iwona no dudó ni un segundo en abrirle las puertas de su hogar hasta que consiguiéramos una familia definitiva para ella. Bety estaba muy triste cuando llegó, pero cada día va mejorando y agradece cualquier gesto de cariño. Es bastante miedosa, esperamos que poco a poco podamos ganarnos su confianza y vuelva a ser feliz!! Se lleva genial con gatos. A los perros les tiene miedo. En casa se porta muy bien, no ladra y sigue a su cuidadora a todas partes, es una perrita muy dependiente.

Si estás interesado en adoptar a Bety, rellena la solicitud de contacto que aparece debajo de su ficha o llama al 644 024 101.